Qué es un Mandala
"Los mandalas son esquemas sagrados que representan la estructura del universo" Los mandalas, y la construcción de un mandala en sí, es una "meditación activa", un instrumento de contemplación, concentración y relajación. Representan el mapa del cosmos: una pequeña muestra totalizadora de la proyección geométrica del mundo. Es esa porción del universo que ocupa nuestro ser, nuestra esencia. Desde el punto de vista psicológico, tiene una función lúdico-terapéutica. No tiene un objetivo explicito, la libertad en la creación va revelando imágenes de la organización interior de la persona, consciente o inconscientemente. Su creación no exige habilidades intelectuales especificas, es una respuesta instantánea, son ejemplos y símbolos cuyo propósito consiste en entender "intuitivamente" las posibilidades infinitas del subconsciente humano. Básicamente es hallar la sabiduría a través de figuras geométricas que combinadas, instintivamente, y con la magia y la vida de los colores, representan nada menos, que nuestro interior. Un mapa que devela el camino sutil hacia nuestro propio centro, el punto a partir del cual se desarrolla nuestro propio universo. El estilo y significado de cada mandala se explica según la época y la comunidad que lo realiza, pero todos hablan de un orden circular con un centro definido. Existe un punto central, la irradiación de ese punto, él circulo que envuelve al centro y él limite exterior. Estos son los componentes básicos y comunes del mandala. Desde el punto de vista espiritual, son centros energéticos de equilibrio y purificación que colaboran con la transformación del entorno y de la mente de quien medita en ellos. Es un poderoso instrumento para crear, contener, entender y preservar el propio espacio sagrado. Por eso es un canto a la armonía".
"Los mandalas son esquemas sagrados que representan la estructura del universo" Los mandalas, y la construcción de un mandala en sí, es una "meditación activa", un instrumento de contemplación, concentración y relajación. Representan el mapa del cosmos: una pequeña muestra totalizadora de la proyección geométrica del mundo. Es esa porción del universo que ocupa nuestro ser, nuestra esencia. Desde el punto de vista psicológico, tiene una función lúdico-terapéutica. No tiene un objetivo explicito, la libertad en la creación va revelando imágenes de la organización interior de la persona, consciente o inconscientemente. Su creación no exige habilidades intelectuales especificas, es una respuesta instantánea, son ejemplos y símbolos cuyo propósito consiste en entender "intuitivamente" las posibilidades infinitas del subconsciente humano. Básicamente es hallar la sabiduría a través de figuras geométricas que combinadas, instintivamente, y con la magia y la vida de los colores, representan nada menos, que nuestro interior. Un mapa que devela el camino sutil hacia nuestro propio centro, el punto a partir del cual se desarrolla nuestro propio universo. El estilo y significado de cada mandala se explica según la época y la comunidad que lo realiza, pero todos hablan de un orden circular con un centro definido. Existe un punto central, la irradiación de ese punto, él circulo que envuelve al centro y él limite exterior. Estos son los componentes básicos y comunes del mandala. Desde el punto de vista espiritual, son centros energéticos de equilibrio y purificación que colaboran con la transformación del entorno y de la mente de quien medita en ellos. Es un poderoso instrumento para crear, contener, entender y preservar el propio espacio sagrado. Por eso es un canto a la armonía".
Los Mandalas en el proyecto Cuadras Armónicas. Reflexiones.
Desde hace un buen tiempo, el Colectivo ArtoArte ha hecho instalaciones de Mandalas en diferentes escenarios: fachadas de casas, murales y galerías de arte. Incluso, nuestro logo es un mandala. Esto se ha hecho como parte del proyecto Cuadras Armónicas. En principio, podría pensarse que la instalación de un Mandala sólo tiene propósitos plásticos, pero si miramos detenidamente, podremos ver que la pieza comienza a jugar un rol importante en el espacio. Y que ese espacio, luego de una instalación, nos invita a generar sensaciones que están en sintonía con la contemplación y la meditación. Por eso creemos que estas figuras exhibidas en espacios públicos -más allá de simples elementos decorativos- nos exhortan, muchas veces sin darnos cuenta, al encuentro con nosotros mismos y a la armonía.
Instalación de Mandala en Fachada de casa. Barrio San Rafael, Localidad 4 de San Cristóbal. |
Y eso, de algún modo, es lo que hemos querido plasmar en murales, fachadas y galerías. Cuando se hace un intervención se establece un diálogo: por un lado la propuesta estética de un proyecto (para nuestro caso Cuadras Armónicas) y la estética propia del territorio donde se hará el trabajo (por ejemplo el Barrio San Rafael Sur Oriental, Localidad 4 de San Cristóbal, lugar donde se ha llevado a cabo el proyecto de Cuadras). En este diálogo convergen la estética de quienes llevan una propuesta de intervención plástica y la estética informal que se ha formado con el paso de los años en el espacio a intervenir. Lo informal, claro está, no tiene aquí un carácter peyorativo sino que nos habla del diseño, quizá asimétrico, que han ido tomando las calles, las cuadras, las flores que crecen silvestres y los perros que corren sin rumbo claro. Eso, sin darnos cuenta, también es una forma de armonía que se va dando de manera espontánea. La calle y el vecindario nos hablan del ingenio que tienen las personas al momento de construir y habitar su entorno. Por eso, a lo largo de más de 8 meses que lleva este proyecto, han ido surgiendo preguntas como: ¿qué significa la palabra vecino? ¿qué es un barrio? ¿cuál es la manera de relacionarnos en un territorio periférico? ¿qué es la armonía y qué es una cuadra armónica?
Mandala desarrollada en taller, lista para ser instalada. |
Estas preguntas van surgiendo mientras el trabajo se va desarrollando, y la experiencia nos ha demostrado que Cuadras Armónicas está inspirado en la ciudad, pero no en esa ciudad caótica que crea figuras estelares de 15 minutos y que luego las hace desaparecer. Este proyecto se emplaza en esos sectores que las revistas y guías turísticas sólo tienen en cuenta para reseñarlas como límite o frontera "peligrosa". No se trata, por supuesto, de negar la ciudad, sino de reconocer las otras realidades que se dan en las periferias: grandes extensiones dibujadas con tapetes verdes, construcciones particulares que se ven afectadas directamente por el medio ambiente, costumbres particulares y formas distintas de convivir.
Mandala instalada en fachada de casa. Barrio San Rafael, Localidad 4 de San Cristóbal. |
Estas son, por ejemplo, algunas de las preguntas y las reflexiones que nos hacemos mientras vamos diseñando e instalando más y más mandalas. Por eso es un diálogo, ya sea con el otro o con nosotros mismos. Por eso, ese diálogo termina constituyendo una armonía que se materializa en mandalas.
Y tú ¿qué harías para que tu cuadra fuera armónica?
Fuentes:
Fuentes:
- Conversaciones informales y disolutas de los integrantes de ArtoArte.
- http://www.losmandalas.com.ar/Que_son_los_Mandalas
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