¿No serán quizá las ideologías la desgracia de nuestro tiempo? ¿El pensamiento creador anegado, ahogado por las teorías, por los conceptos dogmáticos, el avance del hombre frenado por supuestas reglas inmutables?
Memoria de un niño. Jorge Amado. |
Sueño con una revolución sin ideología, en la que el destino del ser humano, su derecho a comer, a trabajar, a amar, a vivir la vida plenamente, no esté condicionado por el concepto expresado e impuesto por una ideología, cualquiera que sea. ¿Un sueño absurdo? No hay derecho mayor y más inalienable que el derecho a soñar. El único derecho que ningún dictador puede recortar ni suprimir.
Memoria de un niño. Jorge Amado.
Alianza Editorial. Alianza Cien, n° 91. Madrid, 1996, 64 páginas.